Mientras
atravieso mi momento, trato de estar atento a lo que la vida puede
ofrecerme...y siento en mi cuerpo una nueva fuerza de vida, ancestral y pura,
una energía poderosa que me recorre. Es
en esos momentos donde hago el ejercicio de respirar conscientemente...sintiendo
bocanada a bocanada ese nuevo aire que me atraviesa, me recorre, me embriaga...y
es allí cuando siento que la musa toca nuevamente a mi puerta...y que es hora
de escucharla.
Como un
compositor universal siento que es el momento de crear nueva música, elegir el
instrumento, descubrir la melodía, dejando que el corazón baile, y al hacerlo despedir
las preocupaciones... y ya sin carga, besar al amor con alegría.
Cada uno
interpreta la vida como puede...hay quienes se entregan al universo y
consideran que ese ente tan difuso es el que condiciona nuestra vida, la vida
de nosotros pequeños seres, diminutos, inexistentes, sin importancia...yo creo
que todo se mueve....que inciertos son los caminos.
Desde pequeños
damos nacimiento a nuestros sueños, forjamos la senda que habremos de
transitar, y lo hacemos paso a paso, tomando decisiones siguiendo nuestro corazón
y así vamos creando ilusiones a las cuales nos aferramos...pues son ellas un
importante motor en nuestras vidas.
Apelamos a nuestro espíritu compositor y así imaginamos notas, soñamos melodías
y escribimos nuestra propia canción.
Esa melodía tan
nuestra, profunda y personal resulta a veces atractiva, y un día sin quererlo,
nos encontramos encaramados a un dúo, creando un canon...una nueva melodía
universal de a dos...y así nos proyectamos en el tiempo...vivimos, nos
olvidamos del tiempo...nos dejamos llevar por esa partitura que parece eterna.
Sin embargo, un día cualquiera al dar vuelta la página nos encontramos con
notas que se mezclan, desaparecen, se transforman saliéndose del pentagrama y
nuestro trino de amor muere en disonante final.
Es el azar que detrás nuestro se esconde,
como un niño travieso, agazapado
experimenta con nuestras vidas
sin responder ni a leyes, ni a tratados
Azar que con nosotros juega
nos da, nos quita, es su forma de amar
abrazarlo resulta imperioso
abrir las alas, echar a volar
Pues ante todo, la vida es hermosa
hay que vivirla como el halcón
volar libre, con decisión encararla
y no mirarla desde un balcón
Mente libre, corazón abierto
nuevas ilusiones, nuevo porvenir
soltar amarras, hinchar las velas
y abrirse al amor que ha de venir
Aunque el azar juegue conmigo
y navegue en un mar de incertidumbre
un día sin saberlo besaré tu playa
tu sonrisa brillará en la muchedumbre
Estaré atento a tu mirada
me perfumará tu capacidad de amar
pero esta vez no pondré rumbo fijo
pues es caprichoso el azar
Bariloche 11 de abril 2016 (pero iniciada hace mucho tiempo)