martes, 25 de octubre de 2011

Duro por fuera, blando por dentro (para el pequeño Rolfi que vive dentro mi papá)



Un pasado demasiado lejano
Un país de idioma desconocido
Historia familiar ninguna
La vida le otorgó ese destino

Pequeño adulto, adulto pequeño
Travesuras, obligaciones, siempre hacerse cargo
Buscarse la vida, apoyar a sus padres
Y el camino al colegio, un sendero muy largo

Un hogar paterno, solitario, complejo
Generaciones familiares que son un fantasma
Quizás fueron estas las causas profundas
De su intenso, doloroso y desgastante asma

La frustración de un primer grado
Maestra cruel, una simple mujer confundida
Los años pasaron, ya la pobre no existe
Pero abierta sigue aun la herida

Mente brillante, corazón puro y tierno
Ideas, proyectos, planes, un autodidacta total
Aeroplanos que vuelan, motores que sus manos mejoran
Habilidades que en su vida fueron su capital

Ese niño desvalido y sensible
Se incorpora a un régimen militar
Encuentra allí orden, contención, estructura
Su sensibilidad lentamente se empieza a ocultar

La adolescencia un hermoso regalo le ofrece
Conocer a esa chica, una mujer espectacular
Espontáneo fue el camino hacia ella
Y en un antiguo “asalto”, la supo conquistar

Largos fines de semana, de grasa las manos cubiertas
Luchar con fierros, cables, desafíos de motor
Y ella siempre, fiel, acompañando, apoyando
Esperando el momento de celebrar el amor

Demasiada fue para la joven esa estructura
Y un día se cansó de tanta obligación
Quiso probar la libertad de otros brazos
Y darle a su vida un nuevo color

Entonces el adulto pequeño, cadete militar
Rienda suelta dio a su sensible corazón
Y durante días, meses, la lloró, la buscó
Desolado, desorientado, una búsqueda con tesón

Pero su decisión, Cupido había tomado
Y su flecha enamorada los terminó de ensartar
Lágrimas bañaron el camino a la alegría
Que sintieron al dar el sí frente al altar

Años de amor y trabajo siguieron a continuación
Cuatro rubias criaturas se sumaron a este par
Posponer sus necesidades, sus propios deseos
Con el fin claro de poderlos educar

Paternidad y responsabilidades
Generaron su externa dureza
Asustado su pequeño niño se escondió
Cuando su adulto, autoridad expresó con firmeza

Proyectos hubo a montones
Unos con suerte, otros con frustración
Sus cuatro hijos, doce nietos trajeron
Y cada uno cultivó una profesión

A través de los años se crece, se aprende
La experiencia regala mejor perspectiva
Y vemos que detrás de su rigidez aparente
Está su niño pequeño marcándole la vida

Y en el otoño dulce de su vida
El adulto dio nuevo lugar al pequeño
Y el sensible Rolfi por fin hoy revive
Ese que es duro por fuera, pero blando por dentro

Sydney, 22 de Octubre 2011

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